El ParÃs del Segundo Imperio en Baudelaire
Traducción española de Alfredo Brotons Muñoz en Obras, I, 2, pp. 89-204, Madrid, Abada, 2008
Si existiese esa alma de la mercancÃa de la que en broma habla a veces Marx, deberÃa ser la más empática que se haya visto en el reino de las almas, pues tendrÃa que ver en cada cual a ese comprador a cuya mano y cuya casa tiene que amoldarse. Pues la empatÃa es el tipo de ebriedad a que el flâneur se entrega en el seno de la multitud.
El ParÃs del Segundo Imperio en Baudelaire
Obras I, 2, p. 145
Obras I, 2, p. 145
El poeta goza del privilegio incomparable de que puede ser a discreción bien él mismo o bien otro. Como el alma errante en busca de un cuerpo, entra, cuando quiere, en la persona de otro. Para él la persona de cualquiera está libre y abierta, y si algunos lugares le parecen cerrados, es porque, a sus ojos, no vale la pena visitarlos.
El ParÃs del Segundo Imperio en Baudelaire
Charles Baudelaire, Spleen de París, Madrid, 1998, p. 29. Cit. en W. Benjamin, Obras I, 2, p. 146
La modernidad es lo que menos ha permanecido igual a sí, y la Antigüedad que dentro de ella debía esconderse presenta claramente la imagen como tal de lo anticuado.
El ParÃs del Segundo Imperio en Baudelaire
Obras I, 2, p. 187