China contemplada a través de un aguacero griego en un café turco
Nacido en 1945 en Copenhague, en cuya universidad estudió lenguas orientales, Henrik Nordbrandt está considerado como uno de los poetas eslavos más destacados de su generación. A principios de los años sesenta abandona Dinamarca y se traslada al sur de Europa. En 1966 publica Digte [Poemas], pero su consagración como poeta de las lenguas danesas no llega hasta 1974 con Opbrad og upprott [Partidas y llegadas]. Su poesía destaca por un clasicismo sabiamente combinado con motivos orientales. El amor y la sensualidad adquieren un papel preponderante en sus poemas, teñidos de melancolía. Su lenguaje mezcla lo mítico, lo cotidiano, el misterio y el gusto por la paradoja y la ironía. Propuesto varias veces para el Premio Nobel, y acreedor de los principales galardones de poesía de su país, Nordbrant recibió en 2000 el prestigioso Premio de Literatura del Consejo Nórdico. Al castellano se han traducido sus libros, El temblor de la mano en noviembre (Bassarai, 2003), 84 poemas (Bassarai, 2005) y Armenia (Bassarai, 2007), así como la antología Nuestro amor es como Bizancio (Lumen, 2003).
China contemplada a través de un aguacero griego en un café turco
La llovizna
cae en mi café
hasta que se enfría
y se sobra
hasta que se sobra
y se aclara
de forma que se hace visible
la imagen del fondo.
La imagen de un hombre
con barba larga
en China, delante de un pabellón chino
bajo la lluvia, una lluvia torrencial
que ha cuajado
en rayas
sobre la fachada azotada por el viento
y en la cara del hombre.
Debajo del café, la leche y el azúcar
que están a punto de separarse
bajo el gastado esmalte
los ojos parecen apagados
o vueltos hacia dentro
hacia China, en la porcelana de la taza
la taza que lentamente se vacía de café
y se llena de lluvia
lluvia clara. La lluvia de primavera
se pulveriza sobre la marquesina de la taberna
las fachadas del otro lado de la calle
semejan un gran
muro de porcelana muy gastado
cuyo resplandor atraviesa las hojas de la vid
hojas de vid que también están gastadas
como dentro de una taza. El chino
ve aparecer el sol a través de una hoja verde
que ha caído en la taza.
La taza cuyo contenido
ahora aparece completamente transparente.
Traducción de Francisco Uriz para Nuestro amor es como Bizancio, Barcelona, Lumen, 2003
Kina betragtet gennem græsk
regnvejr i café turque
støvregnen
falder i min kaffe
til den bliver kold
og løber over
til den løber over
og bliver klar
så at billedet på bunden
kommer til syne.
billedet af en mand
med langt skæg
i Kina, foran en kinesisk pavillon
i regnvejr, styrtregn
der er størknet
i striber
hen over den forblæste fecade
og over mandens ansigt.
under kaffen, mælken og sukkeret
som er ved at skilles
der den slidte glasur
synes øjnene udslukte
eller indadvendte
mod Kina, i koppens porcelain
koppen som langsomt tømmes for kaffe
og løber fuld af regn
klar regn. forårsregnen
forstøves mod tavernaens halvtag
facaderne på den anden side af gaden
ligner en stor
meget slidt væg af porcelain
hvis skær gennemlyser vinløvet
vinløvet der også er slidt
som inden i en kop. kineseren
ser solen komme til syne gennem et grønt blad
der er faldet ned i koppen.
koppen hvis indhold
nu er fuldstændig klart.