enfermedad

Entonces vi que no hay Naturaleza,
que la Naturaleza no tiene existencia,
que hay montes y valles y llanuras,
que hay árboles, que hay flores y que hay hierbas,
que hay piedras y ríos,
pero que no hay un todo al que todo eso pertenezca,
y que un conjunto real y verdadero
es la enfermedad de las ideas.

Alberto Caeiro
Poesía I. Los poemas de Alberto Caeiro 1

«El guardador de rebaños», XLVII, vss. 7-14, p. 149


SENSUALISMO / SENSACIÓN
REALIDAD
---------

Los poetas místicos son filósofos enfermos,
y los filósofos son hombres que están locos.

Alberto Caeiro
Poesía I. Los poemas de Alberto Caeiro 1

«El guardador de rebaños», XXVIII, vss. 9-11, p. 105


SENSUALISMO / SENSACIÓN
---------

Sensación metafísica de las otras personas, y de sus realidades

[como de su decoro...

¡Oh enfermedad humanitaria de mis nervios, siempre

[vibrando llenos de otras personas,

voluptuosidad de gozar y sufrir las posibles hipótesis de la vida

[de otros...

¡Y yo ser sólo yo, sólo yo eternamente, no tener otras vidas

[sino sólo la mía!

---------

He traído conmigo la espina esencial de ser consciente,
traje esa vaga náusea, la enfermedad incierta, de sentirme.

---------

La acción es una enfermedad del pensamiento, un cáncer de la imaginación. Actuar es exiliarse. Toda acción es incompleta e imperfecta. El poema que sueño no tiene fallos salvo cuando intento realizarlo.

---------

En mi alma innoble y profunda registro, día a día, las impresiones que forman la sustancia externa de mi conciencia de mí. Las pongo en palabras perezosas, que desertan de nada más escritas, y siguen errantes, independientes de mí, por laderas y prados de imágenes, por bulevares de conceptos, por senderos de confusiones. De nada me sirve todo eso, pues nada me sirve de nada. Pero me tranquilizo escribiendo, como quien respira mejor sin que la enfermedad haya desaparecido.

---------

La acción es una enfermedad del pensamiento, un cáncer de la imaginación. Actuar es exiliarse. Toda acción es incompleta e imperfecta. El poema que sueño no tiene fallos salvo cuando intento realizarlo.

---------

En mi alma innoble y profunda registro, día a día, las impresiones que forman la sustancia externa de mi conciencia de mí. Las pongo en palabras perezosas, que desertan de nada más escritas, y siguen errantes, independientes de mí, por laderas y prados de imágenes, por bulevares de conceptos, por senderos de confusiones. De nada me sirve todo eso, pues nada me sirve de nada. Pero me tranquilizo escribiendo, como quien respira mejor sin que la enfermedad haya desaparecido.

---------

La locura llamada afirmar, la enfermedad llamada creer, la infamia llamada ser feliz ―todo eso huele a mundo, sabe a esa triste cosa que es la tierra.

Sé indiferente. Ama el ocaso y el amanecer, porque no tiene ninguna utilidad, ni siquiera para ti, el amarlos. Viste tu ser del oro de la tarde muerta, como un rey depuesto en una mañana de rosas, con Mayo en las nubes blancas y la sonrisa de las vírgenes entre las quintas retiradas.

---------

Así, cada uno de nosotros ha nacido enfermo de toda esta complejidad. En cada alma giran los volantes de todas las fábricas del mundo, por cada alma pasan todos los trenes del globo, todas las grandes avenidas de todas las grandes ciudades acaban en cada una de nuestras almas. Todos los asuntos sociales, todas las perturbaciones políticas, por poco que nos preocupemos de ellas, entran en nuestro organismo psíquico, en el aire que respiramos psíquicamente, pasan a nuestra sangre espiritual, pasan a ser, inquietamente, nuestras como cualquier cosa que sea nuestra.

¿Qué arte debe corresponder a este estado de civilización?

Vimos ya que el papel del arte es el de, al mismo tiempo, interpretar y oponerse a la realidad social contemporánea.

Fernando Pessoa
Sobre literatura y arte

«4. [Sensacionismo]», p. 114


FÁRMACOS
---------

Así, cada uno de nosotros ha nacido enfermo de toda esta complejidad. En cada alma giran los volantes de todas las fábricas del mundo, por cada alma pasan todos los trenes del globo, todas las grandes avenidas de todas las grandes ciudades acaban en cada una de nuestras almas. Todos los asuntos sociales, todas las perturbaciones políticas, por poco que nos preocupemos de ellas, entran en nuestro organismo psíquico, en el aire que respiramos psíquicamente, pasan a nuestra sangre espiritual, pasan a ser, inquietamente, nuestras como cualquier cosa que sea nuestra.

¿Qué arte debe corresponder a este estado de civilización?

Vimos ya que el papel del arte es el de, al mismo tiempo, interpretar y oponerse a la realidad social contemporánea.

---------

Hay gente tosca que puede creerse falsamente dotada de cualidades de construcción en arte; pero todo el mundo, y no algunas personas, se pueden creer artistas cuando las cualidades fundamentales exigidas son un sentimiento de vacío en los deseos, un sufrimiento sin causa y una falta de voluntad para trabajar, características que más o menos posee todo el mundo, y que en los degenerados y los enfermos del espíritu adquieren un especial relieve.

Fernando Pessoa
Sobre literatura y arte

«Crítica e historia literaria», «5. [El peligro del romanticismo]», p. 321


LECTURAS / ESTÉTICA
---------

Así nosotros, que somos los únicos en discordar de la decadencia, estamos obligados a tomar una actitud que por su naturaleza es también decadente. Una actitud de indiferencia a causa de la incapacidad para adaptarnos a un medio como éste. No nos adaptamos porque los sanos no se adaptan a un medio enfermo. No adaptándonos somos enfermos. En esta paradoja vivimos nosotros los paganos. Ni tenemos otra esperanza, ni otro remedio.

Fernando Pessoa
Sobre literatura y arte

«Paganismo», «16. Regreso de los dioses», Sobre literatura y arte, p. 167


FÁRMACOS
---------